sábado, 25 de octubre de 2014

Video Evangelio. Trigésimo Domingo del tiempo ordinario

"Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, 
con toda tu alma y con todo tu espíritu"

Evangelio según San Mateo 22,34-40. 

Cuando los fariseos se enteraron de que Jesús había hecho callar a los saduceos, se reunieron con Él,
y uno de ellos, que era doctor de la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba:
"Maestro, ¿cuál es el mandamiento más grande de la Ley?".
Jesús le respondió: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu.
Este es el más grande y el primer mandamiento.
El segundo es semejante al primero: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas".

lunes, 20 de octubre de 2014

Misa por el Fallecimiento del P. Carmelo

El próximo martes día 22, a las 20h se celebrará una misa en recuerdo del P Carmelo, anterior párroco de la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen. 

sábado, 18 de octubre de 2014

Video Evangelio, Vigésimo noveno Domingo del tiempo ordinario

 "Den al César lo que es del César, y a Dios, lo que es de Dios"

Evangelio según San Mateo 22,15-21.
Los fariseos se reunieron entonces para sorprender a Jesús en alguna de sus afirmaciones.
Y le enviaron a varios discípulos con unos herodianos, para decirle: "Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas con toda fidelidad el camino de Dios, sin tener en cuenta la condición de las personas, porque tú no te fijas en la categoría de nadie.
Dinos qué te parece: ¿Está permitido pagar el impuesto al César o no?".
Pero Jesús, conociendo su malicia, les dijo: "Hipócritas, ¿por qué me tienden una trampa?
Muéstrenme la moneda con que pagan el impuesto". Ellos le presentaron un denario.
Y él les preguntó: "¿De quién es esta figura y esta inscripción?".
Le respondieron: "Del César". Jesús les dijo: "Den al César lo que es del César, y a Dios, lo que es de Dios".




Nos ha dejado el Padre Carmelo

En el día de ayer recibo la triste noticia de la muerte del padre Carmelo, El estuvo con nosotros de Párroco en nuestra capilla desde los años 1997 al 2000, después por razones de salud estuvo un tiempo en Madrid pasando posteriormente a ejercer de Párroco en Caldreita un pueblecito de Navarra.
Desde esta página queremos expresar nuestro mas sentido pésame a su hermana Pili, su cuñado Ignacio ,sobrinos y demás familiares y como no, a la comunidad Agustinos Recoletos en general.
Descansa en Paz mi querido amigo.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Carta de un anciano a su hijo pidiendo comprensión y paciencia.

Querido hijo:

El día que me veas viejo y ya no sea yo el mismo de antes, te pido que tengas paciencia e intentes comprenderme.
Cuando, comiendo, me ensucie; cuando ya no pueda vestirme rápido y necesite ayuda: no te desesperes.
Recuerda las horas que pasé enseñándote a hacer las mismas cosas y lo que te costó aprenderlas.

Si, cuando charlamos, repito y repito las mismas historias, mil y una veces, no me interrumpas y escúchame. Cuando eras pequeño, a la hora de dormir, te tuve que explicar mil y una veces el mismo cuento hasta que cerrabas los ojitos.

No me avergüences cuando no quiera bañarme, ni me regañes mucho. Recuerda cuando eras niño y tenía que perseguirte y las mil excusas que inventaba para que quisieras bañarte.

Si me hago mis necesidades o huelo mal, no me avergüences ante los demás. Comprende que no tengo la culpa de ello, ya no puedo controlarlas. Piensa cuántas veces cuando eras niño tuve que cambiarte los pañales, limpiarte después de ir al baño o sonarte la nariz.

Cuando me veas inútil e ignorante sobre los nuevos aparatos y las nuevas tecnologías, te pido que me des todo el tiempo que sea necesario y no me mires con tu sonrisa burlona. Acuérdate con que paciencia te enseñé a hacer tantas cosas … Comer bien, vestirte … Y como afrontar la vida. Muchas cosas son producto del esfuerzo y la perseverancia de los dos.

Cuando en algún momento que hablamos pierda la memoria o el hilo de nuestra conversación, dame el tiempo necesario para recordar. Y si no puedo hacerlo, no te pongas nervioso, seguramente lo más importante no era mi conversación y lo único que quería era estar contigo y que me escucharas un ratito.

Si alguna vez no quiero comer, no me obligues. Conozco bien cuándo lo necesito y cuándo no. También comprende que ya no tengo los mismos dientes para morder, ni el gusto para saborear.

Cuando me fallen mis piernas cansadas y no me sea fácil caminar, dame tu mano amiga de la misma manera en que yo lo hice cuando tú diste tus primeros pasitos.

Yo te pagaré todo con una sonrisa y con el inmenso amor que siempre te he tenido. Algún día descubrirás que, pese a mis errores, siempre quise lo mejor para ti e intenté facilitarte el camino que debías hacer.

Y si algún día te digo que ya no quiero vivir, que quiero morir, no te enojes. Debes entender que esto no tiene nada que ver contigo, ni con tu amor, ni con el mío, ni siquiera con mi fe en Dios. Tienes que comprender que a mi edad ya casi no se vive, sino que sólo se sobrevive y no es fácil.

No debes sentirte triste, enfadado o impotente por verme de esta manera. Simplemente dame tu amor, estando a mi lado. Me estoy preparando para una nueva vida y no me es fácil. De la misma manera como yo te acompañé en el principio de tu camino por este mundo, te ruego que me acompañes, con amor y paciencia, a terminar el mío.

Te quiero hijo…

Firmado: Tu padre, tu madre, tu abuelo o tu abuela…

Tomado de Juan Jauregui


domingo, 12 de octubre de 2014

Grupo de Postcomunión

¿Es posible que los niños que hacen la primera comunión, sigan adelante en su camino de fe? 
Claramente es posible.


sábado, 11 de octubre de 2014

Video Evangelio. Vigésimo octavo Domingo del tiempo ordinario

"Porque muchos son llamados, pero pocos son elegidos."

Evangelio según San Mateo 22,1-14. 

Jesús habló en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo, diciendo: El Reino de los Cielos se parece a un rey que celebraba las bodas de su hijo. Envió entonces a sus servidores para avisar a los invitados, pero estos se negaron a ir. De nuevo envió a otros servidores con el encargo de decir a los invitados: 'Mi banquete está preparado; ya han sido matados mis terneros y mis mejores animales, y todo está a punto: Vengan a las bodas'. Pero ellos no tuvieron en cuenta la invitación, y se fueron, uno a su campo, otro a su negocio; y los demás se apoderaron de los servidores, los maltrataron y los mataron.
Al enterarse, el rey se indignó y envió a sus tropas para que acabaran con aquellos homicidas e incendiaran su ciudad. 

Luego dijo a sus servidores: 'El banquete nupcial está preparado, pero los invitados no eran dignos de él.
Salgan a los cruces de los caminos e inviten a todos los que encuentren'. Los servidores salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, buenos y malos, y la sala nupcial se llenó de convidados. Cuando el rey entró para ver a los comensales, encontró a un hombre que no tenía el traje de fiesta.
'Amigo, le dijo, ¿cómo has entrado aquí sin el traje de fiesta?'. El otro permaneció en silencio.
Entonces el rey dijo a los guardias: 'Atenlo de pies y manos, y arrójenlo afuera, a las tinieblas. Allí habrá llanto y rechinar de dientes'. 

Porque muchos son llamados, pero pocos son elegidos.

sábado, 4 de octubre de 2014

Vigésimo séptimo Domingo del tiempo ordinario. Video Evangelio

"La piedra que los constructores rechazaron 
ha llegado a ser la piedra angular"

Evangelio según San Mateo 21,33-46. 

Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: 

«Escuchen otra parábola: Un hombre poseía una tierra y allí plantó una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia. Después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero. Cuando llegó el tiempo de la vendimia, envió a sus servidores para percibir los frutos. Pero los viñadores se apoderaron de ellos, y a uno lo golpearon, a otro lo mataron y al tercero lo apedrearon. El propietario volvió a enviar a otros servidores, en mayor número que los primeros, pero los trataron de la misma manera. Finalmente, les envió a su propio hijo, pensando: 'Respetarán a mi hijo'. Pero, al verlo, los viñadores se dijeron: "Este es el heredero: vamos a matarlo para quedarnos con su herencia". Y apoderándose de él, lo arrojaron fuera de la viña y lo mataron. Cuando vuelva el dueño, ¿qué les parece que hará con aquellos viñadores?». Le respondieron: "Acabará con esos miserables y arrendará la viña a otros, que le entregarán el fruto a su debido tiempo". 

 Jesús agregó: "¿No han leído nunca en las Escrituras: La piedra que los constructores rechazaron ha llegado a ser la piedra angular: esta es la obra del Señor, admirable a nuestros ojos? Por eso les digo que el Reino de Dios les será quitado a ustedes, para ser entregado a un pueblo que le hará producir sus frutos". 

Los sumos sacerdotes y los fariseos, al oír estas parábolas, comprendieron que se refería a ellos. Entonces buscaron el modo de detenerlo, pero temían a la multitud, que lo consideraba un profeta.