Mis queridos diocesanos:
El día 19 de marzo, festividad de San José, celebra la Iglesia el Día del Seminario. El Papa Benedicto XVI ha convocado este Año Sacerdotal con el fin de que, en el mundo entero, se valore el sacerdocio ministerial. Pues bien, considero que es necesario valorar también el lugar y la institución en donde se forman los futuros sacerdotes. Este es el Seminario. El Santo cura de Ars decía: Oh, qué grande es el sacerdote si se diera cuenta moriría....
1. Responsabilidad y compromiso
El Seminario ha de estar siempre vivo en las conciencias de todos y de cada uno de los católicos responsables. Un año más celebramos el Día del Seminario, fijando nuestra mirada allí donde se fragua el futuro sacerdote, el futuro Pastor. Es el momento de recordar la responsabilidad y el compromiso que cada uno de los diocesanos tiene contraído con el Seminario y, en general, con las formación de los llamados al sacerdocio ministerial.
Esta responsabilidad y compromiso se concreta, a veces, en pequeños detalles, que no por ser pequeños carecen de importancia. Tenemos que interesarnos por el Seminario, valorar el Seminario, rezar por el Seminario, apoyarle moral y económicamente. Todo ello con espíritu de verdadera colaboración. En este movimiento de esfuerzo renovador común que estamos viviendo, el Seminario, su acierto, su pujanza, su buen hacer, viene a ser uno de los principales retos que hemos de afrontar.
2 comentarios:
Buen acierto el incluir la carta de nuestro obispo. A ver si van saliendo vocaciones.
Gracias Francisco :) Hay que regar la tierra y esperar que las semillas que Dios ha depositado vayan saliendo.
Un abrazo :)
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